La domótica nos ha regalado un pedacito de futuro, y es que cuando oímos hablar de neveras que nos advierten de la caducidad de los alimentos, de lavadoras que detectan manchas y regulan el consumo de agua o detergente y de hornos que funcionan solos aún lo recibimos con cierta estupefacción, como si una novela de ciencia ficción se tratara.
Pero no es ciencia ficción, la domótica ya está aquí y en caso de querer instalarla en tu cocina las opciones se abren a más y más objetos. Y ¿qué nos aporta este gran avance?
Comodidad, seguridad y eficiencia energética: Estas son las tres claves de la domótica. Y es que los electrodomésticos pasan a auto regularse, lanzan avisos de seguridad e incluso se conectan con los servicios de alarma en caso de incendio. Además la domótica no sólo se detiene en los electrodomésticos de tu cocina, el mobiliario también lo hace. Se acabaron los estantes inalcanzables o las encimeras demasiado altas. Presionando un botón, las alturas de los muebles variarán garantizando de nuevo la comodidad y evitando accidentes (pues cuantas personas caen por subirse a una escalera o a una silla por alcanzar algo).
Automatizar tu cocina permite interconectar los distintos dispositivos tecnológicos que coordinados entre sí dotan a tu cocina de inteligencia propia. Parece cosa de otro tiempo, pero no, la cocina inteligente ha llegado de la mano de la domótica.
En primer lugar ten en cuenta que tendrás que adquirir electrodomésticos que sean compatibles para poder controlarlos de forma remota. Necesitarás una buena señal por lo que a parte del router de internet fija podemos añadir repetidores o enchufes que funcionan como repetidores de señal. Después conectaremos los dispositivos inteligentes a la señal, los configuraremos y ya podremos controlarlos desde una tablet o incluso desde el mismo móvil.
Los detectores de humo y agua inteligentes pueden también formar parte de la domótica de tu cocina. Conectados a la red podrán hacer saltar la alarma y un aviso llegará a tu teléfono móvil.
Así que pensamientos que nos preocupan y abordan cuando ya hemos salido de casa como «habré apagado el horno» o «habré cerrado bien la nevera» quedarán al alcance de tu mano y podrás solucionarlos de forma antaño impensable.
Sin duda alguna la domótica en tu cocina es un gran avance en todos los sentidos, una inversión de futuro por su bajo consumo, adaptabilidad y seguridad.